Halima Cuadra

entrevistas, chef, Panamá (136)
Spanish

Te iniciaste en el mundo del yoga, pero luego te convertiste en Health Coach. Cuéntame un poco sobre esta decisión.

La decisión la tomé mientras estaba en mi profesorado de yoga. Había hecho muchos cambios en mi manera de comer y pensar. Pero no estaba en un peso con el que me sentía cómoda,  además, me enfermaba constantemente. He sufrido de migrañas desde muy niña y para ese entonces estaban fuera de control. Conocí una “coach” de salud y me  recomendó el programa de otra colega de desintoxicaciones. Me inscribí y 21 días después mi vida cambió. Bajé de peso como efecto secundario, lo mejor es que dejé de sufrir de  migraña, mi piel mejoró, entre un montón de cosas increíbles que pasaron. Después decidí inscribirme en la escuela de nutrición holística. Había pasado por muchas nutricionistas  y aunque me ayudaron en mi proceso, nadie me había explicado que debía comer bien y sabroso. Quería compartir con otras personas esta manera de ver la vida, menos culpable, en la que uno deja de tenerle miedo al pan y empieza a comer bonito.

 

 

¿Qué cosas estamos haciendo mal a la hora de comer?

Creo que lo peor que hacemos son dos cosas: (1) comer para llenarnos y no para nutrirnos, es una cuestión de objetivos. (2) comemos lo mismo  todos los días, no variamos nuestra alimentación.  Si tu objetivo es estar lleno, cualquier cosa puede ayudarte llegar a él, entre más rápido, mejor, sin importar la calidad de lo que estamos comiendo. Pero si tu objetivo es nutrirte, todo cambia: comer comida "lite"  y de caja no te ayuda a cumplir tu objetivo. Cuando vamos a comer, debemos preguntarnos: ¿esto me va a nutrir o me va a enfermar?, y tomar la mejor decisión. También debemos probar la mayor variedad de alimentos que podamos costearnos. Por ejemplo, no solo comer lentejas y frijoles, hay un montón de otros granos que debemos probar: garbanzos, frijoles blancos, arvejas, etc. Una última cosa en esto de los hábitos,  no se trata de ser perfecto siempre y no darse un gustito "no saludable" de vez en cuando. Creo firmemente que es importante comerte algo que te guste mucho de vez en cuando, pero no todos los días. 

 

¿Son diferentes las necesidades nutricionales  según la  edad? 

¡Y las cantidades también! Un adolescente que está en pleno desarrollo necesita más cantidad, pero como dije antes, debe ser más cantidad de alimentos que lo nutran no de alimentos vacíos. Si no te nutres, siempre vas a tener hambre porque el cuerpo está esperando sus nutrientes y terminas atiborrándote de papitas fritas de bolsa. Los adultos necesitamos más cantidad de alimentos que un adulto mayor. Sus procesos van siendo más lentos y, por ende, sus requerimientos bajan, entonces tenemos que tener cuidado que aunque las cantidades bajen, los alimentos deben ser ricos en nutrientes y variados. Pero en todas las franjas es más importante entender que la calidad sí importa. 

 

¿Qué hacemos con los niños que les gusta tanto el azúcar? 

A los niños les atrae el azúcar porque eso aprenden en la casa. Los acostumbramos a que si se portan bien, los premiamos con algo dulce, cada vez que hay una celebración de algo, compramos o preparamos un pastel; entonces ellos hacen la asociación de que lo dulce es igual a algo bueno y feliz. Creo que lo primero es cambiar a los padres, que entendamos el daño que el azúcar les hace a los niños (y adultos también) y que además pueden vivir perfectamente sin el azúcar, quiero decir que no es vital para la vida. Uno de los problemas con el azúcar es que hoy en día TODO tiene azúcar: los cereales, las pastas de tomates que compramos listas en el súper, los aderezos, las sopas enlatadas, etc, etc.   Cuando lees las etiquetas de jugos que venden para las loncheras de los niños es realmente triste, suelen tener entre 25 y 35 gramos de azúcar por envase. Ese es equivalente a 5 o 7 cucharaditas de azúcar, ¡nadie que yo conozca le pone 7 cucharaditas de azúcar a su café de la mañana por más dulcero que sea! Creo que es importante revisar las etiquetas de la comida de los niños y asegurarnos de que no contengan más de 5 - 7 gramos de azúcar por servida, aunque ellos quieran el cereal más rosado y azucarado, al final el padre es el que paga. Los dulces deben estar reservados para ocasiones especiales y nunca deben ser un premio.

 

Jamie Oliver dijo: "La comida debería ser una asignatura como matemáticas", ¿qué crees? 

Yo creo en la educación, en darles las herramientas a los niños y jóvenes para que ellos puedan tomar decisiones. Ojalá llegue ese momento de que en las escuelas se les enseñe a los niños a comer, pero no como un taller una vez al año, sino como algo regular. A cocinar y preparar sus alimentos, a que entiendan este concepto de comer para sanar. Así como antes se daba agricultura, no existe más dentro de las materias regulares, enseñar a un niño a sembrar su comida es como enseñarle a sembrar dinero, ja, ja, ja.

 

La comida es una parte importante en tu vida, pero ¿cómo el yoga también lo es? 

Lo pienso y lo pienso, pero no logro separar una cosa de la otra, podría decir que ambas cosas cubren una necesidad vital de mi cuerpo. La comida me nutre; el yoga me ayuda a mover mi cuerpo y calmar mi mente. El cuerpo está diseñado para el movimiento, estar sentados todo el día es antinatural. Pero puedo entender que debido a la comida rápida y vacía que comemos no tengamos la energía ni las ganas para movernos. Por eso creo que una va ligada con lo otro. Hoy en día me dedico a darles clases a personas con alguna lesión y siempre entre clases les comento que el yoga los puede ayudar a sentirse mejor, pero que si no le dan al cuerpo la gasolina de buena calidad que necesita para desinflamarse y restaurarse, las lesiones duran más y a veces no se curan del todo.